Background Image
Table of Contents Table of Contents
Previous Page  403 / 706 Next Page
Basic version Information
Show Menu
Previous Page 403 / 706 Next Page
Page Background

Capítulo 26. El Segundo Mandamiento: Respeta el Nombre de Dios

• 377

nombre de Dios y de Jesucristo, así como el de la Santísima Virgen María

y de los santos, de una manera ofensiva. El

Catecismo

nos enseña que la

blasfemia consiste “en proferir contra Dios —interior o exteriormente—

palabras de odio, de reproche, de desafío” (CIC, no. 2148). Esto es un

pecado grave. Una habitual falta de respeto hacia Dios, manifestada

en maldiciones o incluso en el uso de lenguaje vulgar, puede crear una

actitud que erosione nuestra relación con el Señor.

Al mismo tiempo, reconocemos una culpabilidad menor cuando el

nombre de Dios es usado a causa de un arrebato indisciplinado del habla

debido a la pasión o a una incitación inesperada a la ira. Necesitamos

cultivar un respeto persistente hacia los nombres sagrados; si no lo

1. ¿Qué nos pide el Segundo Mandamiento?

El segundo mandamiento

prescribe respetar el nombre

del Señor

. Pertenece, como el primer mandamiento, a la

virtud de la religión y regula más particularmente el uso de

nuestra palabra en las cosas santas. (CIC, no. 2142)

2. Menciona un acto prohibido por el Segundo Mandamiento.

El segundo mandamiento prohíbe todo uso inconveniente

del nombre de Dios. La blasfemia consiste en usar de una

manera injuriosa el nombre de Dios, de Jesucristo, de la

Virgen María y de los santos. (CIC, no. 2162)

3. ¿Por qué es importante nuestro nombre de pila, el nombre

que recibimos en nuestro bautismo?

En el Bautismo, la Iglesia da un nombre al cristiano. Los

padres, los padrinos y el párroco deben procurar que se

dé un nombre cristiano al que es bautizado. El patrocinio

de un santo ofrece un modelo de caridad y asegura su

intercesión. (CIC, no. 2165)

DEL CATECISMO