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Tercera Parte. La Moralidad Cristiana: La Fe Vivida

matrimonio. Todos y cada uno de los actos sexuales en el matrimonio

necesitan estar abierto a la posibilidad de concebir un hijo. Es por esto

que la anticoncepción artificial es contraria a la voluntad de Dios para

el matrimonio ya que separa el acto de la concepción de la unión sexual.

Los intentos para conseguir el embarazo separado del acto sexual (por

ejemplo, la fertilización

in vitro

) son moralmente malos por la misma

razón, disocian la concepción del acto sexual.

Los métodos contemporáneos de planificación familiar natural están

haciendo posible que las parejas, en casos de legítima necesidad, dejen

pasar un tiempo entre los nacimientos de sus hijos mientras que a la vez

permanecen fieles al designio de Dios para el matrimonio. Estos métodos

permiten a la pareja tener un conocimiento más preciso del período de

ovulación lo cual hace que puedan evitar o conseguir el embarazo. “La

regulación de la natalidad representa uno de los aspectos de la paternidad

y la maternidad responsables. La legitimidad de las intenciones de los

esposos no justifica el recurso a medios moralmente reprobables (e.g., la

esterilización directa o la anticoncepción)” (CIC, no. 2399).

Durante el matrimonio, las parejas pueden decidir, por razones

serias, evitar un nuevo nacimiento durante algún tiempo o incluso por

tiempo indefinido, pero no deben hacer uso de medios inmorales para

prevenir la concepción. Las parejas también deberían ser conscientes del

hecho de que su amor se expresa de más maneras que solo mediante el

acto conyugal. Abstenerse del acto sexual en determinadas ocasiones

puede ser un acto de sacrificio que lleve a una relación más profunda.

En relación con las condiciones físicas, económicas, psicológicas

y sociales, la paternidad responsable se pone en práctica ya sea

con la deliberación ponderada y generosa de tener una familia

numerosa ya sea con la decisión, tomada por graves motivos

y en el respeto de la ley moral, de evitar un nuevo nacimiento

durante algún tiempo o por tiempo indefinido. (HV, no. 10)

AMENAZAS AL MATRIMONIO

El

Catecismo

enumera los siguientes comportamientos como actos que

minan la finalidad y la dignidad del matrimonio.